La posibilidad de trasladar el mercadillo del domingo al polígono industrial de El Nevero, en un lugar que aún está por decidir, ha generado diversidad de reacciones entre industriales y vecinos de las barriadas de la margen derecha del Guadiana.

Juan Manuel Tamayo, miembro de la nueva junta directiva de la Entidad de Conservación del Polígono El Nevero, declaró ayer a EL PERIODICO que no existe aún una postura en común respecto a este tema, pero en su opinión no le parece bien esta decisión, pues están intentando "adecentar aquello". A priori, Tamayo señaló que el mercadillo no traería ningún beneficio al polígono.

Por su parte, la presidenta de la Asociación de Vecinos de San Fernando, Isabel Generelo, también comentó, aunque a título particular, que según el lugar que finalmente se decida, el polígono está prácticamente en la barriada, como es el caso de las traseras del Seminario. Generelo se quejó de que todo lo que otras barriadas rechazan se lleve a la margen derecha.

También el presidente de la Asociación de Vecinos de la Urbanización Guadiana, Toribio Gragera, lamentó que el ayuntamiento exija solidaridad a un barrio con el que es insolidario, pues "nos tiene totalmente desatendidos". Además habló de los problemas de tráfico que el mercadillo generará en la zona. Sin embargo, para el secretario de esta misma asociación, Antonio Peña, el único inconveniente es el del tráfico, para lo cual el ayuntamiento debería ya realizar proyectos como la rotonda de Luis Chamizo y la mediana de Castillo Puebla de Alcocer.

Al contrario que los demás, la presidenta de la Asociación de Vecinos de El Progreso, Juani Moreno, se mostró encantada con la posibilidad del traslado del mercadillo a El Nevero, pues los vecinos de la margen derecha tendrían más facilidades para ir a comprar los domingos.