Sin avances». Así resumieron ayer los representantes sindicales de los bomberos el resultado de la reunión mantenida con el ayuntamiento para tratar de llegar a un acuerdo que ponga fin al conflicto laboral que los enfrenta y resuelva la falta de personal del parque. El encuentro se producía tres meses después de la última vez que ambas partes se sentaron a negociar, en junio, durante la huelga que protagonizó el colectivo.

Según Ismael Rejas, uno de los portavoces de la Asamblea de Bomberos, los responsables municipales volvieron a reiterar su «voluntad» de tomar medidas para reforzar la plantilla, pero se les comunicó que aún está pendiente el informe de Intervención que lo permita. En este sentido, Rejas señaló que el único paso que se ha dado es que se ha acordado «priorizar» esta cuestión y dejar para posteriores negociaciones lo relativo a posibles cambios en turnos de trabajo y vacaciones.

«Volvemos a estar como en el mes de noviembre, porque eso es lo que se negoció, a la espera del informe de Intervención», lamentó el representante sindical, quien reconoció que habían salido «decepcionados de la reunión». Entonces, según recordó Rejas, ya se consensuó el sistema de localización del que se ha venido hablando, por el que los bomberos, por turnos, estarían localizables para necesidades del servicio, a cambio de un complemento salarial de 150 euros mensuales para cada uno. Ayer no se definió como sistema de localización, aunque es en lo que se está trabajando. Los bomberos ya presentaron una propuesta «adaptada a las necesidades del servicio» y el parque cuenta con la tecnología para que pueda funcionar. Pero sin el informe de Intervención, las conversaciones «solo se han quedado en voluntad», según los sindicatos.

Más allá fueron los miembros del sindicato USO, que se marcharon a mitad del encuentro, al considerar que los representantes municipales habían tenido «tiempo más que suficiente» para sentarse a negociar con soluciones y propuestas «mucho más elaboradas» para discutirlas junto a la de esta central sindical. A jucio de USO, el ayuntamiento y el alcalde, Francisco Javier Fragoso, «solo juegan a que pase el tiempo, faltando el respeto a los representantes de los trabajadores y no afrontando de forma decidida los graves problemas que atraviesa este servicio».

Por su parte, el concejal de Bomberos, Francisco Javier Gutiérrez, reconoció que el retraso en el informe pendiente de Intervención se debe a que hace solo una semana que se le ha solicitado «lo último», aunque no aclaró de qué se trataba. «Las negociaciones siguen por el curso establecido», dijo el edil, que tenía una visión más positiva de la reunión que los bomberos.

Según Rejas, el compromiso es que el informe pendiente estará listo en unos días, cuando se les convocará a una nueva reunión. De momento, los sindicatos esperarán a ese nuevo encuentro, pero advierten de que si no se da una solución, habrá nuevas movilizaciones y volverán a convocar una huelga.