Los dos aviones de control remoto desde tierra Predator B --de los cuatro con los que contará este sistema de armas-- que se encuentran ya en la Base Aérea de Talavera la Real, realizan «vuelos de comprobación a diario», manteniéndose en la actualidad dicho sistema dependiente aún de la Dirección General de Armamento y Material del Ministerio de Defensa (DGAM), según han manifestado a este diario fuentes del Ejército del Aire.

Los Predator B, cuya denominación interna es «sistema NR05», se encuentran «plenamente operativo» y una vez que finalicen los vuelos de comprobación, pasarán a depender directamente del Ejército del Aire.

La Base de Talavera la Real, «como unidad de referencia del Ejército del Aire», continúa «en proceso de recepción del sistema NR05, pues a los dos drones que ya realizan vuelos de comprobación, aún deben sumarse otros dos.

Así, la base aérea y el Ejército del Aire esperan que la entrega del resto de sistemas se materialice «a finales del presente año», que es para cuando está previsto que se haga efectiva la entrega, «de acuerdo con los hitos previstos en el programa».

La Base de Talavera dispone en la actualidad de un hangar de tipo móvil, «con características que lo hacen desplegable en cualquier lugar del mundo», con una capacidad «para al menos dos sistemas aéreos completos». El sistema consta de un avión más una estación de control.

También se ha llevado a efecto la instalación de las antenas y demás elementos de conectividad necesarios para el funcionamiento de los aviones tripulados por control remoto desde tierra.

Además, según han indicado desde el Ejército del Aire, las obras de construcción de otro hangar, este «permanente y con una mayor capacidad», se estima que «estarán finalizadas a principios del próximo año, 2021».

Asimismo, estas fuentes indican que en caso de producirse algún retraso en estas obras, con respecto a la fecha prevista de entrega, «podrá deberse al cumplimiento de los estándares del Ejército del Aire, cuyos requisitos de seguridad integral son muy estrictos».

El proyecto de construcción de este hangar permanente lo adjudicó el Ministerio de Defensa, después de que quedara desierta una primera convocatoria con un precio de licitación de 7 millones de euros, a la empresa Adiante, en octubre de 2019, en 6,3 millones de euros.

PRIMER VUELO DE PRUEBA / Cabe recordar que los dos primeros aviones Predator B llegaron a la Base Aérea de Talavera la Real en diciembre del año pasado desde la Base de Morón, desmontados y para su desembalaje, según explicó entonces el coronel jefe de la base, Francisco Javier Vidal, en el acto de celebración de la patrona del Aire, junto con la delegada del Gobierno en Extremadura.

Otro hito fue cuando el 30 de enero pasado se dio a conocer que el primero de los dos drones que se montaron en la base, sede del Sistema de armas NR05 y el Ala 23 de Caza y Ataque, realizó el día anterior su primer vuelo tras superar las pruebas a las que fue sometido, tratándose de «un vuelo a baja cota y dentro del recinto de la base aérea».

El avión superó las pruebas de motor, generadores, enlace satelital y, siguiendo la programación prevista, realizó la primera prueba funcional, según se dio a conocer entonces desde el propio Ejército del Aire.

Los Predator B no llevan armamento, tienen 20 metros de envergadura, vuelan a una altitud superior a la de las aeronaves comerciales y cuentan con multitud de sensores y de radares, cámaras infraópticas, capaces de enviar imágenes en tiempo real.