La Junta de Extremadura y el Ministerio del Interior han llegado a un "principio de acuerdo" para la enajenación de las 90 viviendas de la Guardia Civil en la barriada de Suerte de Saavedra, en Badajoz, y que el Ejecutivo pretende destinar a un uso social.

Este anuncio se ha producido tras la reunión mantenida por el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, la secretaria de Estado de Seguridad, con Ana Botella, y el secretario general de la Gerencia de infraestructuras y Equipamiento de Seguridad del Estado (GIESE), Ricardo Llorente, en Madrid.

Vara ha confirmado que el acuerdo se llevará a cabo tras una tasación del valor económico de las viviendas por los técnicos de la GIESE. La intención es que se finalice "en los próximos meses" y la Junta de Extremadura se acogerá a la modalidad de pago aplazado para hacer frente al coste de la operación en un plazo de 10 años.

Esta reunión es "un paso más" en las negociaciones que se llevan a cabo entre el Ministerio del Interior y la Junta de Extremadura para el traspaso a la Administración autonómica de este parque de viviendas que ocuparon familias de la Benemérita.

En la primera legislatura de Fernández Vara al frente del Gobierno extremeño ya se iniciaron contactos en relación con este asunto, que se retomaron a partir de 2015 con responsables ministeriales, Delegación del Gobierno y colectivos vecinales de la ciudad para intentar "dar una solución" a estos inmuebles afectados por "ocupaciones ilegales" desde diciembre de 2017.

La intención de la Junta de Extremadura es destinar estas viviendas a uso social. Antes de proceder a la enajenación, el acuerdo deberá ser ratificado por los órganos de la Gerencia de infraestructuras y Equipamiento de Seguridad del Estado del Ministerio del Interior.