Dos familias de Badajoz se están beneficiando de un programa en la atención de enfermos con trastorno de personalidad, que desde hace unos meses están recibiendo terapia en sus domicilios a través de videoconferencia por parte de especialistas. Este tratamiento se puede hacer extensivo a otros pacientes de Extremadura, siendo la comunidad extremeña pionera en esta experiencia, que está auspiciada por la Asociación Española de Familiares de Afectados por Trastorno de la Personalidad (AEFTP) a través de esta misma asociación que funciona con ámbito regional (aexfatpyahoo.es ).
El proyecto fue dado a conocer ayer por el presidente de la asociación extremeña, Manuel Márquez, acompañado de Isabel Lorenzo, cuyo hijo padece este trastorno desde hace 13 años y en los últimos tres meses recibe terapia a través de videoconferencia, con el programa Skype por ordenador. Esta madre contó que el tratamiento que le ha venido ofreciendo la sanidad pública es la atención de un psiquiatra cada 6 meses, cuando mediante este sistema su hijo empezó con terapia una vez a la semana y a medida que pasa el tiempo se va espaciando, y ahora es cada 10 días. "Este programa logra que las distancias y la carencia de profesionales con cualificación necesaria se suplan con un sistema novedoso" que permite que pacientes y familiares reciban terapia por especialistas previamente seleccionados por la asociación española.
El tratamiento se inicia con una sesión de acogida en la que el terapeuta conoce el caso con el testimonio de los familiares y se concierta un calendario de atención en función de la evolución del paciente. La atención es sin ánimo de lucro y cada sesión viene a costar unos 35 euros, una cantidad muy inferior al precio de una consulta presencial. Además, se completará con talleres colectivos para los familiares sobre habilidades generales.
Márquez corroboró que en los dos casos en los que se ha puesto en práctica el resultado está siendo "muy positivo" y ahora esta experiencia se hace extensiva a toda la comunidad autónoma, donde se desconoce la incidencia de esta enfermedad. El porcentaje general es que un 4% de la población padece el trastorno de personalidad y el 40% ha intentado suicidarse. Márquez se quejó de que la salud mental sigue siendo "la cenicienta" de la sanidad pública, porque cuenta con menos medios y eso a pesar de que las cifras hablan por sí solas, porque "mueren más personas por enfermedades mentales que por accidentes de tráfico".
