Estos apartamentos están dando más de un quebradero de cabeza a sus dueños. Algunos no sólo tienen defectos de construcción sino que la Agencia de la Vivienda los ha considerado fuera de ordenación porque debían ser un apartahotel. Respecto a esta irregularidad, no quieren quedarse de brazos cruzados y están a la espera de la decisión de la Fiscalía Anticorrupción, para determinar si pueden verse perjudicados por haber adquirido estas viviendas. De hecho, cualquier obra que quieran realizar en sus casas no pueden hacerla porque no les conceden la licencia municipal, dado que estas viviendas son consideradas clandestinas. Otra duda que tienen se refiere al Impuesto de Bienes Inmuebles, que pagan como casas independientes, aunque no deberían hacerlo si es un apartahotel, aduce el administrador de la comunidad, José Luis García.