La Junta de Extremadura prevé proteger el empedrado portugués de la plaza de Cervantes, conocida como de San Andrés, y hace un tiempo que tomó la decisión de incluirlo, este mismo año, en el Inventario de Patrimonio Histórico Cultural de Extremadura, como informó a este diario a finales de febrero. Sin embargo, pese a tener tomada la decisión, no ha dado aún ningún paso adelante para materializar la protección de este espacio con esta figura.

La Dirección General de Bibliotecas, Museos y Patrimonio Cultural, de la que depende iniciar el proceso, confirmó ayer que «aún no se ha incoado el expediente para su inclusión en el Inventario de Patrimonio Histórico y Cultural de Extremadura», siendo «intención» de esta dirección general «proceder al reconocimiento del empedrado de la plaza de San Andrés de Badajoz a la mayor brevedad posible».

La Junta tomó la decisión de proteger este empedrado, que data de 1888 y es uno de los ejemplos más antiguos de calçadinha fuera de Portugal, a raíz de la solicitud formulada hace cinco años por la Asociación Cívica de Badajoz, que viene reclamando que sea Bien de Interés Cultural (BIC). Pero el Gobierno regional prefiere inventariarlo en lugar de convertirlo en BIC porque «ofrece las máximas medidas de protección patrimonial para el bien pero no plantea la necesidad de delimitar un entorno de protección alrededor del mismo, como sí hace la figura del BIC».

Las obras de reparación de este singular pavimento por parte del ayuntamiento están a punto de comenzar.