El pozo del Cementerio Nuevo se ha secado y son los bomberos, cuando pueden, los que surten de agua a las instalaciones. En el Cementerio Viejo hay un gran socavón en la parte de atrás que sortea con dificultad el coche fúnebre, desniveles en las calles, jardines abandonados, nichos abiertos, rejillas de desagüe rotas y las obras son incompatibles en estas fechas con la presencia de los familiares.

Estas son algunas de las denuncias que realizó ayer la concejala socialista Antonia Márquez Anguita sobre la situación de los cementerios de Badajoz, que calificó de "caótica y lamentable" en el caso del Cementerio Viejo, por lo que reclamó al equipo de gobierno municipal que mantenga estos recintos con "dignidad".

La concejala de Cementerios, María Dolores Beltrán, reconoció el problema del agua en el Cementerio Nuevo, pero aseguró que ayer se estaba perforando un pozo nuevo. Respecto al Cementerio Viejo, Beltrán negó que esté abandonado y afirmó que los nichos están abiertos hasta que los familiares los cierran, pero no es lo habitual; negó que la situación sea caótica pues "está bastante dignificado, ésa es la opinión generalizada" y de hecho se están haciendo obras en nueve calles y la capilla se rehabilitó el año pasado.

Por su parte, la concejala socialista Elisa Gómez Landero también denunció la situación de los cementerios de los poblados y llamó la atención por que hayan sido retiradas las palmeras del cementerio de Balboa y de algunas calles, dejando los huecos, para trasplantarlas en la nueva plaza de La Molineta de Badajoz. Beltrán aseguró que los agujeros están tapados y que el motivo de retirarlas era porque las raíces estaban empezando a reventar las bases de los nichos, así como los acerados y podían afectar a las viviendas.