El grupo socialista en el Ayuntamiento de Badajoz no se opondrá a que se prorrogue la concesión del servicio municipal de agua a la empresa Aqualia, tal como ha propuesto el concejal Nicasio Monterde para acometer el plan de mejora de la red de saneamiento, si se cumplen una serie de condiciones "inexcusables", entre las que el portavoz del PSOE, José Ramón Suárez, destacó que el ayuntamiento suprima las compensaciones a esta empresa por las pérdidas del servicio y que tampoco se establezca un nuevo canon en el recibo del agua.

Asimismo, Suárez solicitó que antes de tomar una decisión el equipo de gobierno debe presentar el plan a los grupos municipales, con los que debe llegar a un acuerdo, pues el portavoz socialista recordó que éste es "un asunto de ciudad". Suárez reconoció que el plan es "urgente y necesario", así como que su aprobación "no es rentable" desde el punto de vista electoral.

Por otro lado, Suárez también apuntó como solución que la inversión sea íntegramente asumida por el ayuntamiento, buscando financiación en otras administraciones o instituciones.

El portavoz volvió a quejarse de la cantidad que "año tras año" el ayuntamiento abona a Aqualia y a la empresa de los autobuses urbanos, Tubasa, para su equilibrio financiero. Este año, a la empresa del agua pagará 2,3 millones de euros y, a Tubasa, 2,6; a pesar de que el precio del agua y el de los autobuses ha crecido muy por encima del IPC: el 89,14% el agua y el 67% el autobús, desde que el PP gobierna.