Pese a que el Club Deportivo Badajoz vive un momento de gloria por sus éxitos en el terreno de juego, el ayuntamiento de Badajoz lo está «bloqueando» y no demuestra un «claro respaldo institucional» al proyecto. Es lo que denunció ayer el portavoz municipal socialista, Ricardo Cabezas, quien urgió al equipo de gobierno la cesión del Nuevo Vivero al club blanquinegro para que se puedan modernizar las instalaciones y, sobre todo, mejorar las medidas de emergencias.

Sobre esto último, alertó de su incumplimiento, según ponen de manifiesto «informes policiales», lo que, además de ser un riesgo, podría suponer la clausura del estadio. En este sentido, señaló que no hay planes de autoprotección o señalización para la evacuación de espectadores, que son responsabilidad del propietario del estadio: el Ayuntamiento de Badajoz.

Cabezas dijo que hace dos años que la propiedad del club está a la espera de firmar ese convenio de cesión y que en septiembre del 2019 la directiva del Badajoz ya entregó una propuesta de acuerdo al equipo de gobierno, sin que hasta la fecha haya habido respuesta. «Es indiscutible que está dando largas», criticó el portavoz socialista, al tiempo que advirtió de que esta situación está generando «inestabilidad» en el equipo. Sin embargo, fuentes municipales aseguraron ayer que ya se está trabajando en un nuevo convenio de cesión y que en este momento está en vigor el anterior, que se ha prorrogado.

El PSOE reprochó al tripartito que haya sido el inversor Joaquín Parra, presidente del Badajoz, quien haya asumido las obras de reforma que se realizaron en el Nuevo Vivero ante su «lamentable» situación y recordó que aún quedan actuaciones pendientes en el interior y exterior.

Cabezas se quejó de la diferencia de trato que dispensa la Fundación Municipal de Deportes a Parra con respecto al anterior inversor y animó a la directiva del Badajoz a acudir a la fiscalía después de que, según el propio club, haya evidencias de que «desde la gerencia de la FMD se ha llegado incluso a modificar documentación que se remitía a los servicios Económicos del ayuntamiento para beneficiar al Badajoz en la época de PremiumSport».