«Vengo al mercadillo porque me parece más seguro que las grandes superficies y porque hay que apoyar al que menos tiene», manifestó ayer María Arenas, una cliente que acudió a realizar sus compras tras 15 días de limitaciones para frenar los contagios de coronavirus. Como ella, muchos vecinos acudieron al mercadillo de los martes, que ayer reunió a 250 vendedores, según el edil de Mercados, Eladio Buzo, que acudió con el presidente de la Asociación de Comerciantes Ambulantes, Julián Cruz, y su tesorero, Domingo Gil.

«Hay más alegría que la semana pasada», afirmó Juan Montañés, que atendía en un puesto de ropa y explicó que «utilizamos un spray desinfectante después de que un cliente toque las prendas». Cruz y Gil agradecieron al concejal su labor «porque tiene muy buena disposición, se ha dejado aconsejar y está con nosotros dispuesto a ayudar en lo que sea necesario». Y se felicitaron porque «viene la gente en un día precioso de otoño».

Buzo explicó que «la semana pasada no vino gente por las limitaciones», pero que ayer «han venido 250 vendedores y la gente, levantadas las medidas, ha perdido el miedo y también ha venido». Dijo que «el mercadillo es seguro y que se cumplen las medidas de seguridad, como hacer el circuito en un solo sentido, el uso de mascarillas y en cada puesto, separado un metro uno de otro, de los geles y sprays».

Además, «ellos están muy comprometidos porque son sus negocios, familiares, de los que viven, y lo han estado desde el principio; ellos aceptaron reducir los puestos para que entrasen todos y la verdad es que el mercadillo es sano y la gente se está animando», dijo el concejal.