Es ya un chiste: "tienes menos luces que los puentes de Badajoz". Pero más chispa tiene lo de la Junta y el ayuntamiento, que después de encuentros, reuniones, comisión mixta y llamadas telefónicas nos dejan a los pacenses en la misma situación: a oscuras y con la boca abierta. Desde luego, hay momentos en los que entran ganas de atravesar los puentes y huir de esta ciudad, aunque me temo que la situación se repite en otras.

Resulta cómico ver a señores de la talla de Luis Millán Vázquez de Miguel y de Alejandro Ramírez del Molino, ambos vecinos de Badajoz, hablando de que si las barandillas son tuyas, las bombillas son mías, que si no llegamos a las balizas o que si los pintas tú.Y mientras tanto, vecinos y visitantes atraviesan y sufren unos puentes cada día más deteriorados.

Creo que los ciudadanos merecen respeto y sólo por eso, por respeto, están obligados a llegar a un acuerdo y a mantener los puentes en un estado digno y decente, porque si algún día ocurre una desgracia en uno de esos puentes entonces los ciudadanos les veremos juntos, colaborando, lo hemos visto en otras ocasiones, como en la riada, ¿por qué ahora no?.