El alcalde desveló el primer informe del estudio de Iniciativas Pacenses sobre la viabilidad de un futuro puerto seco en Caya, una instalación como hay muchas, aunque con características propias: frontera, amplitud de servicios, potencial de la ciudad con su entorno rayano y de Vegas Bajas y comunicaciones y accesos por vía férrea --estación del AVE--, por la autovía E-90, aeropuerto de Badajoz y otro nocturno nuevo, y la cercanía de los puertos de Lisboa, Setúbal y Sines, sin olvidar los de Huelva, Sevilla o Cádiz.

Si a ello se suman talleres, estaciones de servicios, empresas de gestión y manufactura, hoteles, restaurantes, playas de contenedores y aparcamientos, comunicaciones, comercios, y con Lusiberia el nuevo Ifeba al lado, parece clara la viabilidad de un área con estatus de puerto franco. Sin embargo, éste proyecto que se puede ir a 180 millones, no será suficiente, si la ciudad, como denuncia el concejal Lorenzo Blanco, carece de una política industrial tan anunciada y comprometida como ignorada y ausente, como lo demuestra la gestión del principal polígono industrial. Si el ayuntamiento es incapaz de gestionar El Nevero, ¿cómo va a gestionar un macroparque como el anunciado? A no ser que se reproduzca la política de hacer y poner para luego abandonar.