Vecinos de la calle Amparo han mostrado sus quejas por los problemas que les causan la docena de casas abandonas que hay en esta zona del Casco Antiguo, la mayoría con importantes derrumbes, y en las que se acumulan la suciedad y los bichos, según denunciaron los afectados. La situación de estos inmuebles genera malos olores, que aumentan con la llegada de las altas temperaturas.

En muchas ocasiones, estas viviendas, según relató uno de los residentes, se utilizan para "consumir drogas" y los vecinos temen que a través de estas casas cualquier persona pueda acceder a los domicilios que están habitados.

La calle Amparo se divide en dos tramos. El primero cuenta con casas en buen estado, incluso algunas recién restauradas. Sin embargo, la apariencia de las viviendas del segundo tramo es bien diferente: la mayoría de los inmuebles están deshabitados, con puertas y ventanas sin tapiar, llenos de basura de todo tipo y con "riesgo de derrumbe".

Aunque los inmuebles en peor situación se encuentran en el segundo tramo de la calle, los problemas afectan a todos los residentes. "Esto lleva así desde hace muchos años y son permanentes los problemas de todo tipo a diario", lamentó uno de los afectados.

No es la primera vez que los vecinos se quejan por el abandono y deterioro de estos inmuebles. Hace dos años, el ayuntamiento ya demolió una casa que fue declarada en ruinas, después de que se produjeran varios incendios por las hogueras que hacían los okupas .