Los vecinos del Casco Antiguo han mostrado sus quejas porque en muchas de sus calles sigue aún incrustada la cera de las velas utilizadas en las procesiones de la pasada Semana Santa y han exigido al ayuntamiento que acometa una "limpieza integral" para eliminar estos restos.

"Hay en la calle Pizarro, en Menacho, en la plaza de la Soledad, en Vicente Barrantes, la calle del Obispo...Decían que se estaba limpiando, pero se quedó en eso", denunció el presidente vecinal, José María Soriano.

Desde la Concejalía de Limpieza reconocieron que los trabajos para eliminar la cera se habían interrumpido, pero aseguraron que se retomarán en breve y que en las zonas donde sea más complicado limpiar los restos se utilizará una pistola de gravilla.

Los vecinos señalaron que los restos de cera provocan resbalones entre los viandantes y además ensucian y afean la imagen de las calles del Casco Antiguo, especialmente, vías como Menacho y Francisco Pizarro "cuando se acaban de terminar las obras de plataforma única".

Soriano lamentó que año tras año se repita este problema y sugirió que, como ya se hace en otras ciudades de España, la cera de las velas que cae en el suelo se elimine tras cada procesión "con agua caliente a presión reclamó.