El servicio municipal de bomberos tuvo que acudir en varias ocasiones durante la noche y ayer por la mañana a una finca de la carretera de Olivenza donde se estaba produciendo una quema de rastrojos que, aunque no podía salir de su perímetro, afectaba a una gran superficie de terreno. Debido al viento que hacía, el humo procedente de esta finca se notó en buena parte de la ciudad, donde durante casi toda la noche estuvo oliendo a quemado.

La finca de 300 hectáreas de la que procedía el humo se encuentra a varios kilómetros de La Adelantada. Ha estado sembrada con maíz y una vez recogido el cereal, se prendió fuego a los montones de paja y gracias al viento ha prendido en los tallos que quedaban, para así limpiar el terreno.