Lo que queremos es que se recupere el compañero y que los chicos reflexionen sobre lo sucedido», manifestaron ayer fuentes del Instituto Ciudad Jardín, de Badajoz. La comunidad educativa del centro se esfuerza por recuperar la normalidad después de la expulsión de cuatro alumnos de entre 12 y 14 años, de primero de ESO, por agredir físicamente dos de ellos a un profesor y otros dos grabarlo en vídeo y colgarlo en la red social instagram.

A raíz de esa agresión, ocurrida el pasado 17 de octubre aunque conocida el pasado viernes, el profesor agredido se encuentra de baja médica recuperándose de las lesiones y los menores en sus casas, con seguimiento educativo por parte del centro.

El director y la jefa de estudio del instituto declinaron pronunciarse sobre los hechos, dado que «ya lo ha hecho la Consejería de Educación». El centro mantenía ayer su trabajo cotidiano por parte de profesores y alumnos, defendiendo que «no hay conflictividad, es como otro instituto de la ciudad».

Miembros de la comunidad educativa señalaron que «queremos que se normalice la situación lo antes posible», pues tras la agresión «se activaron los protocolos y se aplicó la normativa existente», indicaron, haciendo hincapié en que «los alumnos tienen sus derechos, además de sus deberes, y no debe hacerse una juicio social. Todo el mundo habla, pero está la Ley del Menor que los protege».

Lo que queremos es que «el compañero se recupere, que los alumnos reflexionen; la situación en el centro es de tranquilidad, pues no es conflictivo y lo que importa es que se normalice la situación», señalaron.

EL CENTRO / El Instituto Ciudad Jardín abrió sus puertas en la barriada del mismo nombre en octubre de 2005, hace ya 12 años, y cuenta con un claustro de 68 profesores y unos 520 alumnos. Tiene una sección bilingüe en inglés, imparte Bachillerato de Ciencias y Humanidades, y ciclos formativos de las familias de Electrónica y Electricidad.

Cabe recordar que el profesor se negó en un primer momento a denunciar a los alumnos y que solo lo hizo ante la insistencia de la inspectora del centro y el director, que fue quien lo acompañó a comisaría.

Además, la autoridad educativa, dependiente de la Junta de Extremadura, expresó su apoyo al profesor agredido y le facilitó asistencia jurídica y contacto con un psicólogo del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, señaló la directora provincial de Educación, Piedad Álvarez.

Una vez denunciados los hechos, la Policía Nacional informó del caso a la Dirección General de Políticas Sociales, de Infancia y Familia de la Junta de Extremadura, y a la Fiscalía de Menores, dependiendo de las edades de los estudiantes.

La comunidad educativa del Instituto Ciudad Jardín trabajaba ayer como cualquier otro día, buscando la normalidad.