Acudir al paseo de San Francisco la mañana de la víspera del día de Reyes a hacer cola para degustar un buen trozo de roscón y un vaso de delicioso y caliente chocolate, se ha convertido en una tradición navideña en Badajoz. Centenares de pacenses, de todas las edades, muchos reunidos en familia, no dudaron en pasar la fría mañana en la céntrica plaza para desayunar gratis, que sus hijos disfrutasen un rato divertido y, de paso, tentar a la suerte, pues escondidos en los roscones había 560 premios.

Esta fiesta gastronómica la organiza el ayuntamiento pacense, con la colaboración de chocolates Valor, la Brigada Extremadura XI, cuyos soldados cocinan el chocolate y El Corte Inglés, que pone los regalos. Ayer se entregaron dos bicicletas y un cheque de 300 euros, además de bolsos, libros, paraguas y gorros. El ayuntamiento tenía previsto repartir 4.500 raciones de roscón y de chocolate, para el que se necesitaron 125 kilos de cacao, 500 litros de leche y 25 kilos de azúcar.

Ester Gallardo era una de las jóvenes, que junto a otros 13 compañeros, se distribuyeron entre dos mesas donde se servía el chocolate y el dulce. Ester repetía experiencia y, según contaba, este año había más gente que el anterior, tal vez porque la mañana estaba menos fría. Las colas se empezaron a formar a las diez de la mañana, una hora antes del reparto anunciado. Ester afirmaba que la gente se porta bien, "sabe esperar y no protesta".

Entre los congregados estaba el alcalde, Miguel Celdrán, acompañado de miembros de su equipo de gobierno. Celdrán aprovechó para pedir que en el 2006 siga adelante la Plataforma Logística y que se confirme el Ave "aunque me dejaran en ridículo, porque no me lo creo", que se inicie el proyecto de la orilla derecha del río y se terminen Ifeba y el palacio de congresos.