Desde el 1 de junio al 15 de agosto se han registrado en la ciudad 90 incendios más que en el mismo periodo del 2005. Los bomberos pacenses realizaron 524 intervenciones en ese tiempo del pasado año, de las cuáles 267 fueron por extinción de fuegos, mientras que de junio a mediados de agosto de este año se han contabilizado 657, 357 por incendios.

Este incremento, según el jefe del Servicio de Bomberos, Fernando Bermejo, era previsible debido a las lluvias de la pasada primavera que han hicieron crecer la vegetación. "La diferencia de incendios de un año a otro tiene que ver, sobre todo, con el clima, si la primavera es lluviosa hay más fuegos en verano y si es más seca son menos", señaló.

En su opinión, este verano está siendo "muy variable", porque hay oscilaciones, ya que empezó el verano con muchos incendios pero después llovió y descendió el número para volver a incrementarse. Ahora, las lluvias de ayer darán "un respiro" a los bomberos.