Las márgenes de los arroyos Rivillas y Calamón se convertirán en un gran corredor verde con caminos de trazado irregular y amplias zonas de estancia de unos 104.000 metros cuadrados que discurrirán por todo el tramo urbano de los dos arroyos hasta su unión en el puente de la antigua Nacional V y su posterior desembocadura en el río Guadiana. A través de este corredor se podrá acceder a ocho zonas de 2.430 metros cuadrados de usos recreativos y deportivos para usuarios de distintas edades.
Según el proyecto que ha redactado la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) sobre la adecuación ambiental y acondicionamiento de los arroyos, y que que saldrá a concurso en julio para su adjudicación a final de año, se actuará en un trazado de casi siete kilómetros de longitud, en el que la vegetación tendrá el papel más relevante. El importe global de este proyecto asciende a cuatro millones de euros.
Aunque la obra hidráulica en los arroyos es la más importante del proyecto que ejecuta la CHG en Rivillas y Calamón, la fase verde tendrá una gran repercusión porque será el remate estético de una actuación en la que hasta ahora sólo se ve hormigón, según reconoció el director del proyecto, Nicolás Cifuentes.
ACCESO A LOS BARRIOS Se ha diseñado un paseo principal con una longitud aproximada de 4.800 metros y un ancho de 3 que estará iluminado e irá acompañado de una serie de caminos secundarios que unirán a este paseo principal con los accesos a las distintas barriadas por donde discurren los arroyos (San Roque, Pardaleras y Cerro de Reyes) y con las distintas estancias verdes para el descanso y el paseo paralelas a los cauces.
"Aunque todo el corredor es de zona de estancia y paseo, hay algunos tramos bastantes estrechos, donde no hay apenas superficie, aunque la idea es tenerlo todo conectado", según Nicolás Cifuentes, quien explicó que las zonas deportivas y recreativas contarán con novedosos juegos infantiles y "se intentarán repartir por todos los barrios, aunque donde más espacio hay es el último tramo del Rivillas y en la unión de los dos arroyos en la antigua N-V". En este punto habrá más instalaciones y se ha cuidado más el aspecto estético por ser ésta una de las entradas a la ciudad.
Toda esta obra se realizará en terrenos de la CHG, aunque se han incorporado otros cedidos por el ayuntamiento, por lo que no será preciso realizar expropiaciones, según el director del proyecto.
MIRADORES Y AUDITORIOS En la zona más próxima al puente de Ronda Norte y la Alcazaba se construirán miradores y auditorios naturales al aire libre. "La filosofía es similar a la obra que se ha realizado en Mérida, donde se han hecho zonas verdes sencillas y de fácil acceso para que la gente las pueda utilizar", subrayó.
El proyecto incluye una partida destinada a la conservación y el mantenimiento de la vegetación por un importe aproximado a los 100.000 euros, aunque tras ese periodo de tiempo será el ayuntamiento el que se hará cargo de los parques, jardines e instalaciones auxiliares realizadas, al igual que hizo el ayuntamiento de Mérida.
La obra comenzará a final de año y el plazo de ejecución es de 12 meses aunque "lucirá con mayor esplendor un año después cuando las plantas estén más desarrolladas", señaló.
DOS LAGOS También se ha previsto la creación de dos lagos o balsas de trazado irregular de poca profundidad que se impermeabilizarán con escolleras y plantaciones. Uno estará situado entre los nuevos puentes del Obispo y de Pardaleras, y otro próximo al puente de la antigua N-V. Para el reciclado y aireado del agua se instalarán dos bombas por lago.
