Francisco Rueda González, un joven vecino de La Albuera, esperó a una mujer a la que había observado jugando a las máquinas tragaperras en un café de la ciudad, y la abordó cuando salió con el dinero que había obtenido en premios. La víctima caminaba con muletas cuando el ladrón le arrebató por sorpresa un bolso del tipo riñonera por el procedimiento del tirón.

De este modo, el asaltante se hizo con el contenido del bolso, 250 euros, dos tarjetas de crédito, un monedero, diversos juegos de llaves, dos teléfonos móviles y la documentación personal, dándose posteriormente a la fuga. Una parte de los sustraído fue recuperado tras su detención en los andenes de la Estación de Autobuses de Badajoz a las 6.10 horas del 18 de mayo del 2011.

Los hechos habían ocurrido cinco horas antes en la calle José Pérez Jiménez de la capital pacense. Tras hallar parte del dinero y otros objetos entre sus ropas, el ladrón guió a los agentes hasta el lugar donde arrojó las llaves a un tejado en la avenida del Perú.

Por tales hechos, el Juzgado de lo Penal número 2 de Badajoz ha condenado a Francisco Rueda a la pena de un año y medio de prisión, con la circunstancia atenuante de reparación del daño y la agravante de abuso de de superioridad, según consta en la sentencia, ya firme y de conformidad entre las partes.

Por otro lado, el mismo juzgado y también de conformidad, condena a Estefanía García Martínez y a Sara Montañez Cortés a 1 año y 10 meses de cárcel cada una por dos delitos de robos con violencia, hurto y una falta de amenazas contra la propietaria de la segunda tienda en la que entraron a robar prendas de vestir, en la calle Francisco Luján. La primera estaba en la calle San Isidro. Ninguna de ellas podrá acercarse a sus víctimas a menos de 300 metros durante 5 años.