PROCEDENCIA Y EDAD VIENE DE VALENCIA Y TIENE 38 AÑOS

CARGO DIRIGE LA SOCIEDAD CULTURAL FILARMONICA DE OLIVENZA. SE VINO HACE SEIS AÑOS PORQUE SU MUJER ESTA EN LA ORQUESTA DE EXTREMADURA.

Es desde hace 5 años el director de la Filarmónica de Olivenza, agrupación que por segundo año se encarga de poner música a la feria taurina de Badajoz.

-- ¿Es un lujo para Badajoz o para la Filarmónica?

-- Es un lujo para la Filarmónica y desde el punto de vista musical, también para Badajoz.

-- ¿Qué supone para la Filarmónica venir a Badajoz?

-- Mucho. Es un ingreso extra y este año nos queremos ir a Valencia de intercambio. Además, el honor y el lujazo de trabajar en una plaza de Primera.

-- ¿Para tocar en una corrida hay que ser taurino?

-- Hay que saber algo de tauromaquia. No hay que ser taurino, porque yo no lo soy. A mí me gusta la fiesta de los toros y no tanto los toros. Pero considero que hay que saber, porque mucha gente pide música cuando no debe y hay que saber cuándo tocar y cuándo no. Eso se va perdiendo porque los empresarios piden más espectáculo en vez de más seriedad del toreo.

--¿La música está perdiendo su lugar en la fiesta de los toros?

-- Antiguamente, cuando la música tocaba era porque el torero se lo merecía. Mucha gente nos reprocha que tocamos pronto, pero nosotros decimos que hay una empresa que nos dice el momento en que tenemos que hacerlo, nos guste o no, como trabajadores que somos.

--¿Hay toros sin música?

-- Claro, aunque se le echa de menos y la gente la pide. Cuando a un torero se le toca un pasodoble es porque hace una buena faena y si no ocurre, no hay música.