La plaza de Cervantes, más conocida como San Andrés, de Badajoz, estará en obras como mínimo durante un mes, aunque la intervención podrá alargarse en función de la climatología, según informó ayer a este diario el concejal de Infraestructuras, Jesús Coslado. El inicio de los trabajos para la reconversión de este espacio en plataforma única y la reparación del empedrado portugués de la zona central están a punto de empezar. De momento, ayer se colocaron las vallas y los carteles avisando a los conductores de que deben retirar sus vehículos aparcados en el perímetro para proceder a la excavación.

Los coches ahora estacionados tienen que retirarse y los vecinos ya se pueden ir despidiendo de volver a aparcar en esta plaza. Coslado explicó que ha habido una petición «bastante insistente» de colectivos ciudadanos del entorno, como SOS Casco Antiguo, la Asociación Cívica y algunos vecinos que se han dirigido de manera individual a la concejalía, para manifestar que para lo único que sirven los aparcamientos que hasta ahora ha habido en la plaza es para que haya conductores que dejen en este lugar sus vehículos de forma indefinida, pues no suelen ser estacionamientos temporales.

Por ese motivo, para evitar molestias a los vecinos y facilitarles la vida diaria, sí se va a dejar una reserva de espacio destinado a parada de vehículos, no al estacionamiento, de manera que sirva para detenerse unos minutos, suficientes para que pueda apearse un momento el usuario o bajar la compra. También se eliminará la zona de estacionamiento de motocicletas.

La plataforma única de la plaza de San Andrés forma parte del mismo lote que las calles San Blas, Arcoagüero y López Prudencio, ya transformadas en plataforma única. Se adjudicó por 416.000 euros, con cargo a los fondos Dusi. El pavimento que se colocará en los viales exteriores de San Andrés será el mismo, con adoquinado de granito en la calzada, dándole continuidad.

La obra se acometerá en dos fases, dividiendo la plaza longitudinalmente en dos partes, de manera que no se interrumpa todo el tráfico entre puerta Trinidad y la plaza de España en ambos sentidos al mismo tiempo. Todavía no ha decidido por qué lado comenzarán los trabajos, aunque posiblemente sea por el que tiene continuidad con López Prudencio.

Coslado es consciente de la entidad de los trabajos que se van a acometer, dado que van a suponer que se levante por completo la plaza. Sólo se mantendrá la zona del empedrado central. En concreto, en este espacio se va a restaurar el empedrado rayano en las zonas donde se han levantado las teselas y se van a reparar los desperfectos ocasionados por el paso del tiempo y las raíces de los árboles. La intención del ayuntamiento es que esta segunda actuación se realice «en paralelo», es decir, al mismo tiempo que se acondiciona la plataforma única alrededor. «Vamos a intentar molestar lo menos posible a los vecinos», recalcó el concejal.

El objetivo de esta obra es ganar más espacio para que el peatón «sea el protagonista de la plaza de Cervantes». Por petición de la Asociación Cívica y de otros colectivos del Casco Antiguo, se plantarán árboles en los acerados, que serán más anchos. La previsión del ayuntamiento es colocar en todo el perímetro naranjos como los de la plaza de España, al tratarse de árboles de poco porte que no levantan las aceras.

La plaza de Cervantes será de plataforma única pero no peatonal. Así de claro lo tiene el equipo de gobierno. Coslado aseguró que el tráfico rodado se mantendrá porque «es una zona de paso muy importante» entre puerta Trinidad y la plaza de España y consideran «imposible» que a día de hoy se pueda restringir el paso de vehículos.

Esta obra coincide con el procedimiento iniciado por la Junta de Extremadura para proteger el empedrado rayano de la plaza, que se va a incluir en el Inventario de Patrimonio Histórico Cultural de Extremadura, como adelantó este diario. El concejal apuntó que los trabajos de reposición y reparación van a respetar «totalmente» este empedrado. Según recalcó, los servicios técnicos han realizado una cosulta a Patrimonio para informar del alcance de la obra. «En ningún momento se va a bajar de rasante, con lo cual no hay ninguna actuación de entidad como para que preocupe a Patrimonio «, insistió.

Los trabajadores que se van a encargar tanto del empedrado del centro de la plaza como de la calzada de granito en la plataforma única son portugueses.