"Creo que su marcha debe estar dentro de la normalidad, que no solo haya que perder las elecciones para cambiar; es un signo de libertad personal. Acabamos de tener la renuncia del Papa, decidida libremente. Yo, con el alcalde, como con otas autoriddaes, me relaciono con naturalidad, sin obstáculos. El respeto es fundamental en un régimen de libertad y democracia, lo que no quiere decir que yo acepte todo de buen grado si atenta contra mis principios. Nuestra relación es de amistad y cercanía; he ido a verlo y él ha venido a verme con libertad". F. L.