El servicio municipal de bomberos de Badajoz recibió el aviso sobre las 17.30 horas. Tres horas después, los agentes seguían pendientes del incendio que afectó a la fábrica de tomate Astex de Villafranco del Guadiana, ubicada en la carretera de Balboa, detrás de la factoría de Conesa, a la que pertenece.
El incendio afectó a apilamientos de palés de madera y plástico, así como a bidones que contenían tomate concentrado. Según la información facilitada por los bomberos a este diario, las pérdidas no se podrán cuantificar hasta hoy, porque además de los bidones quemados, se han visto afectados muchos otros por las calorías. La gerente de la fábrica no quiso facilitar información e impidió el paso de este medio de comunicación al lugar del siniestro. Afortunadamente no hubo que lamentar daños personales.
La voz de alarma la dio el vecino de la parcela contigua, que en esos momentos estaba regando sus cultivos. Vio el humo y se acercó a la fábrica. También se vieron afectadas sus propiedades, y ayer por la tarde todavía desconocía el paradero de una decena de cerdos que tenía en unas instalaciones cercanas. Fue este vecino el que declaró a este diario que hace unos cinco o seis meses se produjo otro incendio en la misma fábrica, dato que confirmó la Guardia Civil.
En ambos casos el fuego se inició en el exterior de la factoría, donde están los palés y los bidones apilados, cerca de las instalaciones cubiertas en las que se encuentran los trabajadores.
El alcalde de Villafranco del Guadiana, Juan Sánchez, restaba importancia a lo sucedido, porque aseguraba que lo que se ha quemado no tiene mucho valor. Según él es basura y desechos, porque la pila de palés mayor está más alejada del fuego.
Los propios trabajadores de la fábrica fueron los primeros en actuar, gracias a que existe una boca de incendios y echaron agua sobre el fuego, que cuando llegaron los bomberos ya había quemado toda la pila. Los agentes estuvieron refrigerando y acotando la zona que estaba totalmente afectada.
Según la información de los bomberos, ayer no encontraron ningún indicio de las causas del incendio, que se originó en los palés. El vecino declaró que él no había visto a nadie en los alrededores. La Guardia Civil ha abierto una investigación para esclarecer lo ocurrido. El hecho de que hayan sucedido dos incendios en tan corto intervalo de tiempo lleva a pensar que pudiera ser intencionado. "Da que sospechar", comentó el alcalde. "Algún amigo que tienen por ahí", apuntaba este vecino en relación a la autoría.
