Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) a favor de Aqualand Extremadura (la empresa que gestiona el parque de ocio Lusiberia) y en contra del Ayuntamiento de Badajoz, deja la puerta abierta a otras industrias de la ciudad para que puedan pagar menos por el agua que consumen, si se acogen a las tarifas de uso industrial.

La sentencia es de febrero y fue dada a conocer ayer por el portavoz municipal socialista, José Ramón Suárez. Aqualand solicitó en julio del 2005 al ayuntamiento que se le aplicara la tarifa de uso industrial y se le devolviese lo que había pagado de más desde que formalizó el contrato de suministro en abril del 2001. En estos momentos esta tarifa es un 60% de la de uso doméstico. El ayuntamiento desestimó la petición porque,según las ordenanzas, solo se podían acoger las industrias del Nevero. La empresa recurrió y el juzgado de lo contencioso administrativo volvió a quitarle la razón porque Aqualand debía haberse informado cuando firmó el contrato.

UN RECURSO La empresa no estaba conforme y acudió al TSJEx, que ahora señala que circunscribir la tarifa reducida a las empresas del Nevero no es correcto, puesto que las ordenanzas no dicen que "únicamente" pueden hacerlo estas empresas y además en el reglamento posterior (que deja sin efecto la ordenanza) no hay exclusión alguna.

Ahora el ayuntamiento debe abonar los atrasos por exceso de tarifa cobrado, a contar desde la fecha en que la empresa reclamó, que rondan 17.000 euros.

En estos momentos solo existen 14 industrias, todas del Nevero, que se benefician de la tarifa reducida, según el concejal de Aguas, Alejandro Ramírez del Molino, quien señaló que son todas las que la han pedido. También señaló que cuando se estableció como requisito que las empresas fuesen del Nevero, fue para fomentar que las industrias se estableciesen en este polígono "que estaba un poco olvidado" y por eso cuando Aqualand la solicitó se desestimó.

El administrador de la Entidad de Conservación del Nevero, José Antonio Vázquez, dijo que esta sentencia crea jurisprudencia y permitirá que el resto de empresas la utilicen para plantearse solicitar la tarifa reducida. Quizá a muchas no les merezca la pena, pues dependerá del consumo. De hecho, Vázquez indicó que la mayoría de las industrias del Nevero no se dedican a actividades que precisen mucha agua. No es el caso de Lusiberia, cuyo consumo medio anual ronda los 30.000 metros cúbicos.