La renta agraria extremeña sufrió un descenso del 10,6% en 2012 con respecto al año anterior debido fundamentalmente a la sequía registrada el pasado año, que ha influido en los pastos y en la producción de los cereales de secano, y ha obligado a un mayor gasto en pienso por parte de los ganaderos. Así lo recoge el Informe Anual sobre la Agricultura y la Ganadería Extremeña 2012, que edita Caja Badajoz desde hace más de 20 años. El informe fue presentado ayer por los expertos Enrique Muslera, Francisco Pulido y José Miguel Coleto, coordinadores del mismo; el presidente de la caja, Francisco García Peña, y el consejero de Agricultura, José Antonio Echávarri.

Coleto ha considerado que aunque este descenso del 10,6% se puede considerar muy elevado, hay que mirarlo desde una perspectiva histórica, ya que desde que España está en la UE los agricultores y ganaderos extremeños han aumentado la renta por ocupado un 400%.

En lo referido a las producciones agrícolas, en 2012 ha continuado la reducción de la superficie sembrada de cereales de invierno en favor de los de primavera-verano, especialmente el maíz. Para la ganadería, fue un año malo: el ovino tuvo un comportamiento regular y el porcino malo. El vacuno sin embargo, se ha comportado bastante bien. Coleto ha manifestado que el pasado año en las producciones ganaderas los gastos medios de producción crecieron un 11,6%, debido fundamentalmente al aumento del consumo y el precio de los piensos.