El servicio público de préstamo de bicicletas --que el ayuntamiento prevé estrenar a lo largo de octubre-- se ampliará a más zonas de la ciudad en función de los resultados que obtenga. Así lo manifestó ayer el concejal de Tráfico, Germán López Iglesias, durante el debate en el pleno de la ordenanza reguladora de esta prestación, que se aprobó con los votos a favor del PP, la abstención del PSOE y el rechazo de IU.El portavoz de IU, Manuel Sosa, criticó que el servicio se dirija fundamentalmente a los universitarios por la disposición de las paradas, dejando fuera a ciudadanos de otras barriadas, por lo que los resultados de uso no se podrán extrapolar al conjunto de la ciudad. Por ello, propuso que se ampliasen las bases a San Roque y la Margen Derecha. López Iglesias replicó que su deseo sería que las bicicletas estuviesen por toda la ciudad, pero si la experiencia no resulta "nos las tendríamos que comer con patatas", dijo. Confió en que en "unos meses" se pueda duplicar el número de paradas.El PSOE estudiará posibles alegaciones a la distribución de las paradas. Todos aprobaron la tarifa del servicio, 12 euros anuales.