El aumento de usuarios que acudieron a Urgencias del hospital Infanta Cristina los días 25 y 26 provocó que el servicio se desbordara y las consiguientes quejas por parte de algunos pacientes por la demora en la atención. Según informaron ayer fuentes de la Consejería de Sanidad, hubo momentos en los que en el hospital llegó a haber hasta 80 personas pendientes de valoración.

Siete de los usuarios han presentado reclamaciones por la espera, cuatro el 25 de diciembre y otros tres, el 26. Ambos días se superó la media de urgencias atendidas en este servicio: el primero se asistió a 218 personas y el segundo, a 199, cuando lo habitual es que a diario se reciba a unos 175 pacientes.

La Consejería de Sanidad explicó que esta situación suele producirse en fechas navideñas cuando coinciden varios días de fiestas seguidos, hace frío y se registra un pico de incidencia en la gripe, lo que incrementa la demanda asistencial. A ello se une que muchas personas acuden directamente al servicio de Urgencias del hospital, en lugar de dirigirse primeramente a las Urgencias de Atención Primaria.

Sanidad aseguró ayer que en ambos casos el personal que hay trabajando los fines de semanas y festivos «es el mismo a lo largo de todo el año».

Una de las afectadas por la demora en la atención, que ha presentado una de las reclamaciones al SES, relató que el enfado entre los pacientes que esperaban era generalizado y denunció «la falta de personal» y «mala coordinación» en el servicio el 26 de diciembre, día que esta ciudadana acudió al hospital. Añadió que el orden para ser atendidos «brillaba por su ausencia» y, según aseguró, hubo casos en los que algunos pacientes tuvieron que esperar varias horas, como una familia con un niño que tenía que haber ingresado en Neurocirugía, pero que fue derivado a Urgencias y estuvo «más de tres horas» sin que se resolviese su situación.