La gerencia del Área de Salud de Badajoz ha descartado por el momento arreglar el edificio del centro de salud de la Zona Centro para mantenerlo en él, pues de hecho siempre ha sido pequeño, y baraja dos opciones. Una es ocupar un espacio que ceda el ayuntamiento, un local o un terreno, que ya se ha solicitado y que «parece que no será fácil, aunque aún no ha dado una respuesta definitiva»; y otra, que es la que más ventajas ofrece para el SES, la de trasladar el centro al edificio de la Audiencia, en avenida de Colón.

Así lo comunicó ayer Dámaso Villa, gerente del área, de modo que el centro de salud se mantendrá en su actual ubicación hasta que se dé con una solución definitiva, lo que se estima que supondrá un periodo de 2 a 2,5 años de espera. Si bien, el edificio de los Pinos se mantendrá en permanente monitorización por la misma empresa que realizó el informe sobre el estado de su estructura. Ésta determinó en octubre que hay que arreglar la cimentación, donde está el origen de las grietas aparecidas en las fachadas y en el interior. La empresa ha considerado que el edificio es seguro y que no hay peligro.

Explicó Villa que ayer por la mañana informó a los trabajadores del centro de salud de la opciones con las que se trabaja y que éstos se muestran partidarios de arreglarlo y volver al mismo lugar, sin que hayan expresado temor alguno por permanecer en el edificio hasta su traslado.

Así mismo, la Gerencia del Área de Salud y la Consejería de Sanidad ya han mantenido los primeros contactos para plantear la cesión del edificio de la Audiencia, una vez que éste quede libre tras el traslado de los juzgados al nuevo palacio de justicia que se construye en la Ronda Norte, cuyas obras están paralizadas por la entrada en concurso de acreedores que la empresa adjudicataria de las mismas.

El desalojo del edificio judicial se espera que se produzca en un periodo de 6 a 12 meses, cuando se termine la obra del nuevo. Después habría que acometer una reforma para adecuar al menos dos plantas, para ubicar en él el centro de salud, que ocuparía unos 2.500 metros cuadrados de los 8.000 que tiene el inmueble.

Villa explicó que el edificio es de la Administración central, que «es planteable que lo ceda a la autonómica con este fin» y que las obras podrían costar unos 2 millones de euros, de ahí que no estuviera preparado para acoger el centro de salud hasta dentro de 2 o 2,5 años.

UNA DECISIÓN / La opción de hacer un edificio nuevo requiere contar con un terreno municipal dentro de la zona de salud, lo que «parece complicado en principio», aunque aún no se ha descartado. Pero por ahora impera la de ir a los juzgados, pues el tiempo de espera de una y otra sería similar. Lo que no quiere el SES es tener que afrontar dos traslados, por la complejidad que ello conlleva.

El gerente del área también se refirió a que el presidente de la diputación «ya zanjó la posibilidad de ocupar parte del antiguo hospital provincial», Y a que en una visita de los técnicos a la Audiencia, consideraron que el edificio «está en buen estado, bien emplazado y sería fácil hacer las obras». Además, hay espacio para que el Cedex vaya con el centro de salud, una vez descartado su traslado a Suerte de Saavedra.

No obstante, «aunque las conversaciones van bien -con Justicia-, la cuestión no está cerrada y aunque va hacia el sí, el definitivo no lo tenemos seguro», dijo.

Lo que sí planteó como prácticamente descartado es mantener el centro de salud en los Pinos, donde en la actualidad «no hay espacio para una Unidad Bucodental, ni para Rehabilitación, ni una sala de juntas», que sí tendrían cabida en los juzgados.

Dámaso Villa afirmó que se reunirá con las asociaciones de vecinos de Pardaleras y del Casco Antiguo para informarles de la situación, de las opciones que se barajan y los porqués de cada una de ellas, aunque dijo que «nunca una decisión, la que sea, contentará a todo el mundo».