Los trabajadores de la empresa que construye un edificio en el solar de la calle Prim continuaban ayer sus labores para levantar un muro de hormigón, con el encofrado ya hecho, y en el rellenado del hueco que dejó el desprendimiento de tierra los pasados viernes y sábados.

Dicho desprendimiento dejó al aire una tubería del agua y otras conducciones eléctricas, así como dejó sin sujección la calzada de la calle Santo Domingo, lo obligó a que se cerrara al tráfico, así como un tramo de Juan Carlos I.

El concejal de Vías y Obras, Alejandro Ramírez del Molino, manifestó ayer que se sigue trabajando para resolver el problema y que a lo largo de esta mañana se reunirá con los técnicos para decidir si se abre al tráfico la calle cortada.