Una veintena de personas guardaron un minuto de silencio a las 12.00 horas de ayer, a las puertas de la Delegación del Gobierno, en repulsa de los últimos crímenes machistas perpetrados, el de una mujer en Jaén y el de una joven española en Alemania, además de otras recientes agresiones a jóvenes en Mérida y La Codosera.