Cayetano criticó el aumento de la deuda municipal, después de llevar el PP años aludiendo a la herencia negativa de 65,7 millones de euros que dejó el anterior gobierno socialista. Tanto Cayetano como su compañero Lorenzo Blanco, recordaron que con el nuevo crédito "la deuda sube a 88 millones", y si bien es verdad que con menor amortización anual, debido a los bajos intereses, también lo es que el periodo de amortización se alarga". Y ello sin contar la deuda contraída con Aqualia por el Plan Director de Infraestructuras, que pagan los vecinos en el recibo del agua, de otros 24 millones de euros.
Incidieron en que parte del dinero que ahora se pide se destina a material como ordenadores, "de forma que se estropearán o se quedarán obsoletos en tres años y los seguiremos pagando durante 19 años", según Blanco.
El grupo socialista hizo un especial hincapié, en el apartado económico, en que "hay un claro aumento de la presión fiscal: 6,57% en impuestos directos, 3,17% en indirectos y 15% en tasas ya otros ingresos", así como considera que "ha fracasado estrepitosamente la política de contención y moderación del gasto corriente".
