Una exposición excesiva al sol para lucir bronceado cada verano sin preocuparse por los riesgos que entraña esta práctica puede convertirse con el paso de los años en un envejecimiento prematuro de la piel: manchas, flacidez y arrugas. Y lo que es más grave, a largo plazo, en cáncer de piel.

Para advertir de estos riesgos y fomentar el uso de fotoprotectores, el Colegio de Farmacéuticos de Badajoz desarrolló ayer una jornada informativa. A través de un simulador del envejecimiento los ciudadanos pudieron comprobar cómo será el aspecto de su rostro dentro de diez años si no utilizan fotoprotección y cómo será si la piel se protege de forma adecuada. Hubo más de una sorpresa. "Yo me cuido desde hace mucho tiempo cuando tomo el sol, pero ver cómo sería tu cara dentro de diez años es una depresión, por eso hay que cuidarse más", relataba Juana tras hacer la prueba.

"En el simulador nos encontramos con la cruda realidad, sin retoques de ningún tipo, pero con diez años por delante estamos aún a tiempo de evitar ese envejecimiento", recordaba Carmela Llorente, vocal de Dermofarmacia del colegio.

Las personas que pasaron por el autobús del Colegio de Farmacéuticos, que estuvo toda la jornada en la avenida de Elvas, también se pudieron medir la melanina, el grado de hidratación y el sebo de la piel para conocer qué fotoprotector es el más adecuado.

Los farmacéuticos previamente han recibido charlas formativas para "refrescar" sus conocimientos en fotoprotección.