Ropa de bebé, objetos de decoración navideña, mantelerías, bolsos, cojines, figuras del portal de Belén son solo algunos de los artículos que se pueden adquirir en el Rastrillo Solidario de Manos Unidas, que un año más pone a la venta las labores realizadas por las voluntarias en su taller para recaudar fondos para un proyecto social. En esta ocasión, el dinero se destinará a la atención sanitaria de la población del barrio de Abobo, en Costa de Marfil, valorado en 7.456 euros y que tendrá más de 19.000 beneficiarios directos y 43.500, indirectos.

Abobo es un barrio periférico de Abidjan, en el que malviven multitud de marfileños de diferentes etnias en infraviviendas, con calles mal asfaltadas, llenas de aguas estancadas, basura y material fecal diseminado. Esto conlleva el aumento de enfermedades como el paludismo y diarreas, que se suman a otras como el sida. En el año 2005, la Congregación del Ange Gardien abrió un centro médico para atender a estas personas con apoyo de Manos Unidas y ahora ha vuelto a solicitar la colaboración de esta oenegé para rehabilitar dos salas, ampliar el laboratorio y realizar otras reformas que contribuyan a prestar una mejor asistencia a los usuarios.

El rastrillo solidario está ubicado en un local en la esquina de la calle Vasco Núñez con el paseo de San Francisco. Abre por las mañanas y por las tardes (en horario comercial) y hasta mediados del mes de diciembre se podrán adquirir artículos a precios que van desde un euro a los más de 200 que cuestan las mantelerías que las voluntarias del taller han confeccionado a mano con esmero y cariño para este fin solidario.