Durante doce horas, el Palacio de Congresos de Badajoz se abrió ayer a los refugiados. En sus instalaciones se celebró el Festival Solidario 2.Sur organizado por la Fundación Paz y Solidaridad Gregorio Morán, de CCOO. El objetivo de este festival es sensibilizar a los ciudadanos sobre las dificultades que soportan muchas personas en el mundo en relación a los derechos humanos, injusticias sociales y defensa de las libertades, en un momento en que «es bastante dramática la situación que están viviendo muchos migrantes que se ven obligados a salir de sus países por cuestiones de violencia» y que suman 65 millones.

El foco se puso en esta situación a través de multitud de actividades, entre las que tuvo cabida la música, el teatro, el yoga y el debate a través de encuentros de trabajo de media docena de oenegés de desarrollo que se hicieron un hueco en las instalaciones. La idea del festival era transmitir el mensaje de solidaridad con una voz en off como hilo conductor que enlazaba todas las actividades.

La directora de la fundación, Ana Isabel González, explicó que todos los artistas y colaboradores eran extremeños pues su pretensión era mostrar la Extremadura solidaria con los demás, «aunque seamos una región pobre, 2.Sur es que somos el sur del sur, que aún necesita mucho desarrollo pero tenemos gente muy preparada que puede ayudar a otras personas con más dificultades».