La Junta de Extremadura solo ha recibido tres solicitudes de otros tantos establecimientos de Badajoz que pretenden celebrar un cotillón para recibir el Año Nuevo, lo cual no quiere decir que finalmente lo lleguen a organizar, porque hasta finales de mes no se sabrá si tienen autorización. Además, a estas tres salas hay que sumar las fiestas que se organicen en locales que no tienen que pedir permiso especial porque su actividad ya lo incluye, como es el caso de discotecas. Lo cierto es que año tras año desciende el número de locales que organizan estas celebraciones que suelen empezar con cena de gala y terminar con barra libre. Este año son solo tres los solicitantes, justo la mitad que el año pasado, cuando se organizaron 6 fiestas. En el 2004 fueron 8 y el año anterior, en el 2003, se convocaron 10.

Las tres salas que han pedido permiso para celebrar fiestas son DardyIs, Salones Venecia y la sociedad Casino de Badajoz. Ahora la Dirección General de Protección Civil, Interior y Espectáculos, dependiente de la Consejería de Presidencia, deberá comprobar si cumplen todos los requisitos. El director general, Francisco Manuel Sánchez Calzado, señaló ayer que aunque el plazo de solicitudes terminó el lunes pasado, día 11, todavía puede llegar alguna más, que se haya presentado por correo o ventanilla única.

TENDENCIA El concejal Alejandro Ramírez del Molino declaraba ayer que le parecían muy pocas las solicitudes presentadas pero apuntaba que "posiblemente la tendencia es a no hacer cotillones porque la gente se va más de pubs que de fiesta". Ramírez del Molino señaló que según las conversaciones que ha mantenido con algunos hosteleros, la conclusión es que "la gente está cambiando sus hábitos y parece que le gusta más irse de bares". También José Luis Ascarza, presidente de la Confederación de Empresarios de Turismo (Cetex) manifestaba que es cierto que cada vez hay más gente que prefiere celebrar esta noche con amigos en un pub "y se toman sus copitas por las calles".

Una empresa que tradicionalmente celebraba fiestas, hasta este año, es el hotel Río, que venía pidiendo autorización para organizar dos cotillones, en los salones Guadiana y en el Palacio de Cristal. Pero este año no va a celebrar ninguno. Según declaró ayer a este diario José Luis Iniesta, ya el año pasado no alcanzaron las expectativas y este año decidieron que no iban a volver a preparar cotillones. Darán cenas para sus clientes, las uvas y una copa pero sin cotillón y si hay comensales que así lo deseen podrán seguir la fiesta en el Gran Casino. Iniesta cuenta que el año pasado se prepararon para recibir al menos 500 invitados y finalmente fueron 200. "Ni para empezar", apunta.

CHIQUILLERIA También Iniesta coincide en decir que "lo que le gusta a la gente es salir a la calle y estar de pub en pub". Este empresario apunta que antiguamente se celebraban grandes fiestas pero ahora "se han quedado para la chiquillería y ése no es mi público, cada uno tenemos nuestro público y el nuestro son los cuarentones y cincuentones, que ya se dedican más a ir a casas particulares o a reunirse unos cuantos e ir de bar en bar". Iniesta se muestra conformista y añade que "hay que aceptar los cambios sociales".