Por el conservatorio de Badajoz han pasado miles de alumnos, desde la cupletista Olga Ramos, que estudió violín, a Pedro Pirfano, que llegó a dirigir los coros de RTVE y el Conservatorio Vizcaíno de Música, la soprano María Coronada y el pianista Esteban Sánchez, Medalla de Extremadura.

Los orígenes del centro se remontan a 1927 cuando cinco profesores, bajo la batuta de Bonifacio Gil, crearon la Sección Artística de Artes e Industrias. Las clases se impartían en los sótanos de la diputación, que en 1930 creó el conservatorio provincial y las aulas se trasladaron entonces al seminario.