El domingo estuve en Talavera de la Reina participando en la gran manifestación, convocada por segundo año por la Mesa por la Recuperación de Talavera y su Comarca, con el lema Queda mucho por hacer. Esta Plataforma agrupa a 80 colectivos de la sociedad civil con una vocación apartidista y de consenso. Más de 20.000 personas salieron a la calle con reivindicaciones concretas. Desde el pasado año han mantenido múltiples reuniones con las administraciones locales, provinciales, autonómicas y nacionales, con las que han conseguido firmar un «Pacto Institucional por la Recuperación de Talavera», en el que se comprometen a ejecutar sus reivindicaciones, con plazos y responsabilidades. Reivindicaciones que llevan años comprometidas pero que nunca se ejecutan. Algo nos suena.

Talavera ha sido tradicionalmente la segunda mayor ciudad de Castilla -La Mancha. La crisis le ha dado fuerte, siendo una de las ciudades de España con mayor desempleo. En los últimos años ha perdido población, pasando a ser la cuarta ciudad de la región, al ser superada por Guadalajara y Toledo. Es la única ciudad de más de 40.000 habitantes de Castilla-La Mancha por la que no pasa un AVE, y soportan la línea indignante de ferrocarril con Extremadura. Algo nos suena.

Sus reivindicaciones pueden ser idénticas a las que se reclaman desde hace siglos en Extremadura: Tren Digno, el río, plataforma logística o más Centros Universitarios, exigencias largamente comprometidas desde las administraciones. Algo nos suena.

Talavera y Extremadura van unidas al pasado y al futuro. Durante siglos hemos estado comunicados por la única vía radial que no conectaba Madrid con los puertos españoles. Era un callejón sin salida. Hoy podemos estar involucrados en un proyecto común: El Corredor Sudoeste Ibérico, con una rama del Corredor Atlántico. Un Corredor internacional que une el litoral Portugués con Centro Europa dentro de las vías básicas de la UE. Desde el ámbito local es mucho más fácil movilizar sentimientos y voluntades, pero las soluciones vienen de conectar esfuerzos locales para estar presente en flujos internacionales. Lo tenemos por primera vez muy cerca de nuestras manos y merece la pena forzar que las cosas ocurran. Enhorabuena a los talaveranos.