Mercurio --Dios romano del Comercio-- vuelve desde ayer a coronar la torre de La Giralda, edificio regionalista que mandó construir el comerciante Manuel Cancho en 1930 y que fue su propietario hasta lo vendió a Telefónica en 1993 y que tras unos años en uso ha permanece cerrado desde 2003. La Giralda es un edificio singular den el perfil urbano de Badajoz, situado en la plazuela de la Soledad, con decoración del mismo estilo arquitectónico pero con grandes cuadros del modernista Antonio Juez-,

‘El Giraldillo’, como se conoce popularmente esta figura de 1,5 metros de altura y de 50 a 60 kilos de peso, regresa a la cúspide de «la Giralda chica» pero como réplica exacta al original, en cerámica vidriada al cobre, con una estructura de acero inoxidable para evitar que la corrosión y el óxido afecten al resto de materiales con las inclemencias del tiempo, pues éstas, las aves y una grúa que trabajaba en la obra del Muba le causaron graves daños.

Es por ello que Telefónica ha contado con expertos, técnicos y artistas para restaurar la pieza original, cuya estructura podría peligrar si vuelve a la torre, motivo por el que se decidió realizar una réplica que es la que ya se ve sobre La Giralda, según Pilar Soler, la restauradora.

La pieza original estaba hecha en barro y cerámica vidriada en cobre, una técnica ya desaparecida; presentaba pérdidas de elementos y de volúmenes, «por lo que era redimible en su composición, pero irrecuperable en estabilidad y firmeza». Además, apenas se ha encontrado documentación historiográfica, señaló Soler. Y añadió que «el resultado del trabajo de «un equipo multidisciplinar de especialistas, finalmente, ha sido espectacular».

El original lo ha cedido temporalmente la compañía al ayuntamiento «por un año, para disfrute de los ciudadanos», según el director de Telefónica, Guillermo Guillermo Santamaría. Además, señaló que «desde el principio, Telefónica se hizo cargo de la situación por el interés en recuperar un símbolo del perfil urbano de la ciudad y asumió el compromiso de restaurarlo».

«Como el original no puede volver a su sitio, se ha hecho una copia exacta», dijo, «Y en la restauración se ha tratado con el mismo esmaltado fruto de diferentes pruebas y análisis con el fin de lograr un resultado unitario con una capa cromática de rigatino», señaló con Soler.

El alcalde, Francisco Javier Fragoso, agradeció «el compromiso de Telefónica con la ciudad al restaurar la pieza, hacer la réplica y ceder el original», que se expondrá «custodiado hasta la Noche en Blanco» en el Museo de la Ciudad», afirmó.

Santamaría, Soler, Fragoso y la concejala de Cultura, Paloma Morcillo, presentaron la imagen en las Casas Consistoriales y poco después, los técnicos devolvían ‘El Giraldillo’ a su lugar. En todo este proceso, se ha tratado de «transmitir los valores esenciales de la obra y su sentido de autenticidad, pese al grave estado en que se encontraba. La actuación ha sido rigurosa y respetuosa con el bien, velando en todo momento por la salvaguarda y recuperación de esta pieza tan significativa, emblema de la memoria colectiva de la ciudad de Badajoz», dice el informe de Telefónica.

Por otro lado, el grupo municipal socialista, pidió en un comunicado al alcalde que «se dé por la aludido» con la actuación de Telefónica de reponer ‘El Giraldillo’ y «recupere la campana de la Torre Espantaperros realizando una réplica de la antigua para instalarla en su lugar de origen».

Recordó el grupo del PSOE que «ya en 2014, la Asociación Amigos de Badajoz reclamó que se hiciera una reproducción de la antigua campana, en las alegaciones que presentó al Plan de Fortificaciones, sin que haya recibido respuesta alguna hasta la fecha».

Consideran los socialistas que el ayuntamiento debe realizar «una réplica de la campana datada en 1517, que en 1856 se trasladó al ayuntamiento y en 1878, su mal estado motivó que la corporación acordara su destrucción». Desde 1890 la campana, de 1,21 metros, está en el Museo Arqueológico. «Ahora que ‘El Giraldillo’ rivaliza con la Soledad, sería bueno que el ayuntamiento recuperase esta pieza de su historia», como pidió Amigos de Badajoz y pide el PSOE», dice.