Tras el éxito de Mujeres que compran flores, Vanessa Montfort ha encontrado la inspiración en su propia experiencia vital y en la de una exreligiosa expulsada de su congregación por ser contestataria con el papel de la mujer en la Iglesia para su nueva novela: El sueño de las crisálidas, que ayer presentó en la Feria del Libro de Badajoz. Su alter ego, Patricia, una experiodista que hace años sufrió acoso laboral, y Greta, la exmonja, coinciden durante un viaje en un avión y, a pesar de sus diferentes vidas, se dan cuenta de que tienen en común que hace años que ninguna de las dos se han detenido a mirar un atardecer. La reclusión y el estrés las han hecho presas de la urgencia, pero ambas han decidido que en el futuro no será así.

«Son dos mujeres que el lector encontrará, no ya en el momento de la oscuridad, sino en uno de plena resurrección, del que van a resurgir como crisálidas en algo más fuerte y libre». Patricia y Greta son las protagonistas, pero a su alrededor aparecen numerosos personajes a través de los que la autora aborda diferentes temas. «Tienen en común que son rebeldes con causa, por eso me gusta decir que esta novela está llena de herejes, no en el sentido religioso, sino que son personas que luchan contra lo establecido», explica.

«No oculto que me ha salido una novela muy justiciera y muy ‘telmayluisiana’ y creo que los lectores lo están disfrutando mucho y nos estamos comunicando a través de esa rebeldía», asegura.