El nuevo jefe superior de la Policía Nacional en Extremadura, José Antonio Togores, se comprometió ayer a reducir «aún más·» la tasa de criminalidad en la región para que ésta se mantenga como la más segura de España y Europa, como ocurre desde enero del 2012. Lo hizo en su toma de posesión, un acto celebrado en la sede de la Delegación del Gobierno, en el que destacó el «magnífico» trabajo de los policías extremeños del que, según dijo, dan fe datos como que el índice de infracciones sea de 33 por cada mil habitantes, muy por debajo del 44 de la media del conjunto de España.
El máximo responsable de la Policía Nacional en la comunidad autónoma, con 38 años de servicio y cargos de responsabilidad dentro y fuera de España, aseguró que para él será «prioritaria» la defensa de los colectivos más vulnerables como las víctimas de violencia de género, menores, ancianos, inmigrantes, personas en riesgo de exclusión social, así como la lucha contra las nuevas formas de delito como el ciberacoso, las estafas por internet o de los que son objeto los cada vez más numerosos turistas que visitan la región.
Togores reconoció la merma «significativa» que en los últimos años ha sufrido la Policía Nacional en Extremadura, que confió en que se palie con la nueva Oferta de Empleo Público, afirmó que hará todo lo posible para que sus superiores sean conscientes de esta necesidad y pongan remedio. Añadió que todos los miembros que componen la plantilla son «imprescindibles» y confió en «estar a su altura».
Asimismo, se mostró dispuesto a intensificar la colaboración con la Guardia Civil, las policías locales, la judicatura y la fiscalía, tendió la mano a los sindicatos y destacó la importancia de la colaboración de las asociaciones de vecinos, bomberos, 112, Cruz Roja, Protección Civil y los vigilantes de seguridad privada.
Al acto de toma de posesión asistieron, entre otros, el director general de la Policía Nacional, Germán López Iglesias, la delegada del Gobierno, Cristina Herrera, el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, la vicepresidenta de la Junta, Pilar Blanco Morales, y el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo. En su intervención, López Iglesias, destacó que las infracciones penales en Extremadura descendieron casi un punto con respecto al año anterior (los delitos de robo con violencia se redujeron un 8,70%, los de robo con fuerza bajaron un 7,26% y contra la libertad sexual cayeron un 10,475).
Tanto el director general como Fragoso y Herrera destacaron la labor del antecesor de Togores, Miguel García-Izquierdo, durante sus 6 años en el cargo.
