Más de 300 delegados sindicales de CCOO, UGT y CSI-CSIF del sector de limpieza de edificios y locales públicos se concentraron ayer a las puertas del hospital Infanta Cristina para exigir a la patronal que retome las negociaciones del convenio colectivo provincial en el que piden una subida salarial del 3,6%, de acuerdo con el incremento del IPC, y una serie de mejoras sociales relacionadas con la Ley de Igualdad, la prevención de riesgos laborales, la salud laboral o la formación.

Los delegados sindicales reprobaron la actitud de la patronal, "que lleva todo el año bloqueando las posibilidades de llegar a un acuerdo sin aceptar ninguna propuesta sindical". Las negociaciones se rompieron la semana pasada después de que "la patronal abandonase unilateralmente la mesa tras ofrecer una subida del 2,1%", según el secretario de Negociación Colectiva y Empresas de CCOO, Alberto Franco.

Además criticaron que las mismas empresas hayan aprobado la subida solicitada por los sindicatos en la provincia de Cáceres, "donde se consiguió una cláusula de revisión salarial".

Franco aseguró que "estamos abiertos al diálogo", aunque recordó que de no retomarse la negociación continuarán las movilizaciones ante las puertas de colegios públicos, hospitales, edificios universitarios y sedes de la Junta de Extremadura, principales clientes de estas empresas. Tampoco se descarta, según dijo, una convocatoria de huelga.

Unas 3.000 personas trabajan en este sector, más del 70% son mujeres, en el que operan 200 empresas. La mayoría de los contratos son temporales, por ello exigen, además, que se conviertan en indefinidos.

El representante de CCOO anunció que la intención de los sindicatos es que a partir del 2008 se consiga firmar un convenio regional.