"Los chicos y la chicas vienen muy motivados, porque la visita a la Academia de Seguridad se debe a que tenemos un proyecto de educación en valores, entre ellos la educación vial, y ese es el motivo de la visita y por lo que vienen tan contentos, porque sabían más o menos lo que se iban a encontrar". De este modo explicaba José Fernández, profesor del colegio público Cervantes, de Cáceres, el interés de sus alumnos por esta actividad, pero "sobre todo, lo de los coches es para ellos impresionante", dijo.

Como ellos, fueron 240 escolares de Cáceres, Llerena, Mirandilla, Novelda y Alcazaba viajaron hasta Badajoz para participar en unas jornadas de puertas abiertas de la Academia de Seguridad Pública, las únicas que celebra este año por causa de la crisis, pues suelen ser dos por curso, y la demanda es tal y que tiene lista de espera hasta el 2011.

Los escolares tienen la oportunidad de acercarse a todos los elementos relacionados con la seguridad, que la Academia divide en siete apartados, por los que rotan los chicos y las chicas organizados también en siete grupos, coordinados por sus profesores y agentes de la policía local. Así pasan "por educación vial, tráfico, extinción de incendios, situaciones de emergencia, protección civil o defensa personal", explicó el director de la Academia, Francisco Atanet.

Tras una breve charla sobre educación vial en el aula del 112, los chicos y las chicas conocen el funcionamiento de un equipo de bomberos con un camión y otros medios, las motos de la policía local cuyos agentes les muestran con ejercicios cómo trabajan por su seguridad y se esfuerzan por que les sientan como un cuerpo cercano y no represivo. También pueden visitar el interior de un centro de control de emergencias móvil, un camión de mando dotado con todas las tecnologías de la información para dirigir operaciones de cualquier tipo de emergencias y desde el que los responsables de los equipos pueden tomar las decisiones sobre el terreno con datos a tiempo real.

El helicóptero del SES y el hospital de campaña de Cruz Roja también atraen el interés de los grupos infantiles, pero lo que más les llama la atención es la pista de karts, por la que pasan todos para hacer un circuito completo de varias vueltas.

"A mí lo que más me gustan son los coches", aclaraba el pequeño Lucas Ortega, de Cáceres, aunque también llamó su atención "la Cruz Roja". José Fernández valoró que que los chicos y las chicas responde "con muchísima ilusión; para ellos es una novedad muy grande y de ahí la verdadera enseñanza que debe salir fuera de las aulas porque se necesita para el desarrollo personal del niño, que ellos lo vivan, que lo toquen y puedan manipularlo".