El traslado de la biblioteca municipal del Cerro de Reyes a los salones de la antigua sede de la parroquia Jesús Obrero será "prácticamente definitivo", según la concejala de Cultura, Consuelo Rodríguez Píriz, quien confirmó la información adelantada por este diario el día anterior y explicó que el arzobispado ha aceptado la cesión en uso al ayuntamiento de parte de este espacio por un periodo de 10 años. El local se dividirá para compartirlo con la asociación Misioneros de la Esperanza, que desarrolla talleres para niños los fines de semana.

Rodríguez Píriz no quiso adelantar la fecha de apertura de las nuevas instalaciones porque se tienen que acometer obras de acondicionamiento, que básicamente consistirán en habilitar dos aseos y comprobar que la rampa de acceso tiene la pendiente adecuada.

La concejala agradeció la colaboración del arzobispado, no así la de la Asociación de Vecinos de Cerro Reyes y en concreto de su presidenta, Isidra Méndez, a quien recriminó su falta de colaboración por no haber aceptado que el taller de manualidades se llevase a la biblioteca para que estuviese más frecuentada. A estos reproches contestó Isidra Méndez y defendió la colaboración prestada en todo momento por su asociación, que fue la que le sugirió pedir los locales de la parroquia. Méndez aclaró que las mujeres del taller no querían trasladarse porque ya en su actual local están teniendo problemas de inseguridad.

Por otro lado, Rodríguez Píriz comentó que el bibliotecario no quiere volver a su puesto, tras las amenazas sufridas, al mismo tiempo que pidió que se pongan soluciones a la falta de seguridad del barrio.

Respecto al futuro del local actual de la biblioteca, la concejala se mostró a favor de derribarlo, pero Méndez señaló que "es una locura" porque significaría dar la razón a los vándalos.