La Policía Nacional ha detenido en los dos últimos meses a cuatro personas --un hombre y tres mujeres-- que intentaban introducir sustancias estupefacientes en el centro penitenciario de Badajoz cuando acudían a visitar a sus familiares o amigos. Todos se encuentran ahora en libertad con cargos.
Las detenciones son el resultado de la intensificación de los controles a las personas que acceden a la prisión con el objetivo de luchar contra esta práctica delictiva y evitar que escondan en sus pertenencias o vestimentas sustancias estupefacientes.
El último arresto se produjo el 16 de mayo, cuando una mujer de 50 años, identificada como M. V. C., pretendía acceder a las instalaciones con casi 11 gramos de hachís, 1,1 gramos de heroína y 0,3 gramos de cocaína.
El día 6 de mayo hubo otra detención por hechos similares. En este caso, una mujer de 36 años, con iniciales E. L. C., llevaba en el interior del cuerpo más de 7 gramos de heroína, 30 de hachís y cocaína. Otra mujer, de 44 años e identificada como M. J. S. S., también fue detenida el 12 de marzo al sorprenderla con 10 gramos de hachís.
Y en marzo se detuvo a un hombre, con iniciales F. B. P. y de 54 años, a quien se le incautaron 45 gramos de hachís y 3,8 gramos de heroína que llevaba oculta en su ropa interior. El valor de los estupefacientes una vez que se consiguen introducir en la prisión, se triplica.
