La futura Política Agrícola Común (PAC), que comenzará a aplicarse a partir del 2014, va poco a poco tomando forma. La Comisión Europea pretende realizar un profundo cambio en el sistema de reparto de las subvenciones destinadas a la agricultura y a la ganadería, que pondrían fin al sistema actual de pago único. Algunos de estos cambios, como la supresión de las referencias históricas declaradas por los productores que sirven para determinar las cuantías de las ayudas, serán suprimidas; y se eliminarán la diferencias entre la subvenciones que reciben los nuevos y los antiguos países que forman parte de la Unión Europea.

Estas son algunas de las medidas comentadas ayer por el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, en el marco de unas jornadas de debate sobre el futuro de la PAC. Las conclusiones de este foro servirán para preparar las primeras propuestas firmes que la Comisión Europea tiene previsto presentar en el mes de noviembre, antes de que comiencen las negociaciones en el 2011.

Sin embargo, Ciolos dejó muy claras ayer algunas de sus preferencias de cara al futuro de una política, la agrícola, que absorbe la mitad del presupuesto de la UE, con 58.000 millones de euros anuales (cifra para el año 2010). Así, comentó que su intención es "redefinir" la forma en que se reparten los fondos entre los agricultores y ganaderos. El comisario europeo apuntó que conservar los criterios históricos que se utilizan para calcular los pagos "no es ya una opción: las referencias del pasado no nos permitirán acompañar al sector hacia su modernización".

Esta medida puede ser perjudicial para los intereses del campo extremeño, pues supondría la revisión de un "presupuesto consolidado" con destino a las explotaciones agrícolas y ganaderas españolas, y por tanto extremeñas. Así lo indica Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE, en una primera valoración de la propuesta del comisario europeo.

En su opinión, esta medida puede ser "preocupante" en la medida en que en los próximos años España pasará a convertirse en un contribuyente neto. Es decir, que aportará a la Unión Europea más de lo que recibe, por lo que la cantidad destinada al campo extremeño podría verse mermada, y más aún teniendo en cuenta que el presupuesto empezará a repartirse entre más perceptores, tras la incorporación de los países del Este.

PRESUPUESTO En este sentido, Ciolos admitió que la reforma de la PAC estará condicionada por el presupuesto de la Unión Europea a partir del 2014, fecha en el que comenzará a aplicarse el nuevo sistema de reparto de las ayudas.

El responsable europeo de la PAC defendió, por otro lado, fijar condiciones "realistas" a la hora de distribuir los pagos, entre las que ha citado el tipo de explotación, la clase de región, los problemas climáticos, ambientales o el contexto en el que trabaja el agricultor. Descartó asimismo que se vaya a fijar una "prima fija" a todos los agricultores o ganaderos, pues es más partidario de tener en cuenta "la diversidad" de las producciones y de las zonas rurales y además, cree que para que los subsidios tengan más apoyo de los contribuyentes deben estar adaptados a las distintas situaciones.

El comisario europeo no se refirió, sin embargo, al sistema de "seguros agrarios" que garanticen una renta mínima a los agricultores del que se habló en la reunión informal de ministros de agricultura de la UE celebrada en Mérida a finales de mayo y principios de junio, en la que avanzó que la nueva PAC debe contribuir a "la estabilidad" y mayor beneficio de los agricultores y ganaderos.