Ni pancartas, ni manifiestos en contra, ni siquiera la convocatoria de alguna asamblea para analizar la situación y adoptar medidas de protesta. A los alumnos de la Facultad de Ciencias de la Documentación y la Comunicación la última sentencia del Tribunal Supremo que obliga a demoler dos plantas del Cubo no les ha hecho reaccionar, aunque en teoría serían los más perjudicados si se lleva a efecto. Según los delegados de curso consultados por este diario, ya ha habido tantas sentencias, unas a favor y otras en contra, que no saben qué va a ocurrir con estas instalaciones.

Angel Pino Pérez, delegado de tercero de Comunicación, comentaba ayer que este proceso judicial "se ha alargado durante tanto tiempo" que ya los alumnos ven el derribo "como algo lejano". Para Pino, "es una sentencia más" y hasta ahora ninguna de las decisiones judiciales que se han ido emitiendo "ha supuesto ningún cambio". Por eso, apuntaba que en estos momentos los comentarios que se oyen no son de preocupación, sino sobre la decisión que se va a tomar y no han surgido iniciativas de movilización "porque no hemos visto un paso definitivo" acerca de que tenga que acometerse ya la demolición. Para este alumno, ese momento llegará cuando el Ayuntamiento de Badajoz adopte una decisión.

En cuanto a los estudiantes del último curso, el problema no va con ellos si sus planes son marcharse ya de la facultad. Es lo que argumentaba María Jesús Carrillo, delegada de cuarto de Información y Documentación. "Cuando yo entré veía más movilización pero ahora los alumnos están más tranquilos y creen que al final no van a tirarlo", opinaba.

Manuel Vivas es delegado de primer curso de Comunicación y también confirma que él no ha detectado preocupación alguna entre sus compañeros respecto al futuro de la facultad. "Yo creo que será porque están agobiados ahora con los trabajos y cada uno va a su rollo", apuntaba este alumno, que consideraba que esta facultad podría continuar en su actual ubicación con menos plantas. No opinaba igual Angel Pino, quien señalaba que en estos momentos a esta facultad "no le sobra espacio".

El que sí ha mostrado su preocupación es el rector de la Universidad de Extremadura (Uex), Segundo Píriz, quien ayer defendió que si la "voluntad" de la Facultad de Documentación y Comunicación es continuar en el edificio actual y si la sociedad está convencida del acierto de su ubicación en esa zona de Badajoz, "esto debería tenerse en cuenta de alguna forma". Agregó que si no son "suficientes motivos", el curso está avanzado y por lo tanto el derribo "no tendría sentido", según las declaraciones recogidas por Efe. Tras asistir a la presentación de una iniciativa de empleo, a pregunta de los periodistas aclaró que su institución "no opina" sobre las sentencias, ya que están para "acatarlas", al tiempo que informó de que están en contacto con el Ayuntamiento de Badajoz que, a su juicio, "intentará la mejor salida posible" dentro de la ley. Esta facultad "ha contribuido --dijo-- a regenerar un espacio urbano que hace pocos años no estaba como hoy día".