La semana próxima llegarán a Badajoz técnicos de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), para inspeccionar el edificio que será su sede, la antigua escuela de hostelería, para ver las posibilidades de adaptación a su nueva función docente, en la plaza Alta, en el corazón histórico de la ciudad, para atender a los más de 600 alumnos de la ciudad que están matriculados.
Es un acierto de la UNED acercarse a los alumnos pacenses, como antes lo hizo a los de otras zonas de la región y es un logro de la ciudad, que ha reclamado con razones y datos sobradamente justificados esta extensión desde hace años; y de la Asociación de Amigos de la UNED, cuya actuación ha sido, además de paciente, ejemplar, por su compromiso de facilitar las tutorías a muchos alumnos, con ayuda del ayuntamiento.
La presencia de la UNED en Badajoz era una vieja aspiración que llega tarde, pero llega, con la contribución del director del centro extremeño, asumiendo la filosofía de la propia UNED. También parece un acierto el lugar escogido, junto a Biblioteconomía, el museo y la biblioteca, que con el tiempo puede ser un potente foco universitario urbano.
