La unidad de ictus del hospital Infanta Cristina iniciará su actividad el próximo 1 de febrero. Esto supondrá que habrá un neurólogo de guardia con presencia física —que ahora no hay— y que se realizarán técnicas neurorradiológicas urgentes durante las 24 horas del día. Así lo anunció ayer el consejero de Sanidad, José María Vergeles, quien explicó que este nuevo servicio permitirá atender «en tiempo» a los pacientes que hayan sufrido un accidente cerebrovascular, a los que se podrá intervenir para eliminar el trombo, favoreciendo así su recuperación y minimizando las posibles secuelas.

Esta unidad, que ya funciona en el hospital San Pedro de Alcántara de Cáceres desde hace varios años, dará cobertura a la provincia de Badajoz. Una vez implantadas ambas unidades, el SES podrá poner en marcha el programa de teleictus que se ha ido desarrollando y ampliando por los distintos servicios de urgencia del resto de los hospitales de la región.

Otra de las actuaciones previstas por Sanidad para el segundo semestre de este año es la mejora de las instalaciones de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pediátricos del hospital Materno Infantil, con el objetivo de que los padres de los menores ingresados en esta unidad puedan permanecer más tiempo cerca de ellos. Ahora, en lo que se refiere a las horas de visita está «a la cola», según el programa Niños con cáncer. La inversión prevista es de 35.000 euros.

Vergeles también confió en que, dado el avance de las obras, la unidad de Oncología Pediátrica del Materno se pueda abrir en la segunda mitad del 2017, dando así respuesta a las demandas que las asociaciones de pacientes y los propios niños ingresados han ido planteando. La nueva unidad estará dotada inicialmente con once habitaciones adaptadas, una sala de recreo y una zona de pruebas

Vergeles informó de que también se reiniciará este mismo mes la actividad del banco de tumores —al que «puso fin» el Gobierno del PP, recordó—, que posibilitará la realización de estudios que permitan conocer a qué tratamientos van a responder mejor los tumores que se diagnostican. Además, según destacó, su puesta en marcha hará posible que la región se incorpore a la red de biobancos del Instituto de Salud Carlos III, pues Extremadura es una de las dos comunidades españolas que no está adherida.

Asimismo, anunció que desde el sábado habrá un médico más en el Punto de Atención Continuada (PAC) de Montijo los días laborables y los fines de semana y festivos, un refuerzo de doce horas diarias, lo que supondrá un coste anual de 85.000 euros.

Estas actuaciones se suman a la ya anunciada adquisición de un acelerador lineal de altas prestaciones, por importe de 3,3 millones de euros, para tratamientos radioterápicos de los tumores, que se incorporará a lo largo de este año.

Además de dar cuenta de los proyectos previstos para este año, el consejero de Sanidad hizo balance de la actividad asistencial en el área de salud de Badajoz a lo largo del 2016, cuando las intervenciones quirúrgicas se incrementaron un 9,5% con respecto al año anterior. En este sentido, destacó el aumento de las cirugías programadas, un 10,3% más que en el 2015, lo que ayuda —dijo— a reducir los tiempos de espera de los pacientes para ser operados. También crecieron un 21% las consultas externas (496.124), los ingresos hospitalarios (3,3%) y las urgencias atendidas en el Infanta, el Perpetuo Socorro y el Materno Infantil—un 2,4% más—, situándose la media diaria en 414.

Lo que sí se redujo, según los datos ofrecidos ayer por José María Vergeles, fue la estancia media de los pacientes hospitalizados, algo que puso en valor porque, aunque solo sea una disminución de unas décimas (de 6,91 a 6,71 días), según reconoció, «cuesta mucho». En este sentido, aseguró que es un logro que hay que agradecer a todos los profesionales del complejo hospitalario.

En lo que se refiere a Atención Primaria, aumentaron un 0,75% las consultas a los médicos de familia, las de pediatría y enfermería, así como a los Puntos de Atención Continuada, con un 6,2% más. A esto último, ha contribuido en gran parte, según el consejero, la reapertura de los PAC de Zahínos y Valverde de Leganés, con 10.083 y 15.255 urgencias atendidas respectivamente, lo que viene a refrendar que sus reaperturas estaban «justificadas».

También se incrementaron las inspecciones de seguridad alimentaria (establecimientos) y en salud medioambiental (agua potable y piscinas).